Los budistas, sus valores y prácticas, en países de habla hispana. Una exploración sociológica. Primera parte.

JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ DÍAZ

Departamento de Sociología de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Barcelona

Este artículo forma parte de la edición especial «El budismo en los países de habla hispana»

A pesar de la relevante historia y arraigo del budismo en el mundo hispano [1] todavía existe un vacío de conocimiento respecto de los practicantes y seguidores que conforman el mundo social budista.

La mayor parte de información sobre la población budista a la que tenemos acceso proceden de datos y encuestas mundiales, como el World Values Survey, con alta representación del mundo asiático (donde viven la mayoría de budistas [2]). Los datos del budismo en Occidente y los países de habla hispana son escasos y no permiten una buena visión de cómo es la población budista fuera de Asia y su relación con el budismo, sus valores y sus prácticas tanto individuales como sociales.

Centro zen en Cuba. Templo de Kosen Shin Ji (Espíritu de perfume del Zen), a 20km de la Habana, Cuba. Fuente: https://zenkan.com/centro-zen-en-cuba/

Y de ahí nuestro objetivo de acercarnos un poco a las características de las personas seguidoras o cercanas al budismo y a su camino de práctica hacia la iluminación.  Con ello pretendemos también entender mejor los procesos de introducción y adaptación del budismo a Occidente y específicamente al mundo de habla hispana, caracterizado por ser mayoritariamente católico.

Para aproximarnos al mundo de los practicantes budistas, el pasado mes de julio de 2022 lanzamos la primera encuesta internacional sobre sobre sus características, sus valores y prácticas, en los países de habla hispana («Siguiendo el camino budista: Nuestros valores, religiosidad, espiritualidad») [3] realizada en colaboración con Buddhistdoor en Español y patrocinada por la Fundación Dharma-Gaia. En las siguientes páginas se presentan y analizan algunos de sus resultados [4]. Las respuestas obtenidas ofrecen ya una primera imagen de muchas dimensiones de la vida del budismo en los países de habla hispana.

Empezamos la exploración del mundo social de los budistas con la presentación de sus características sociodemográficas para pasar después a analizar sus caminos en el budismo, la historia y motivos de su relación con el mismo y su nivel de identificación y cercanía a sus escuelas, sus creencias, objetivos y prácticas y acciones. Intentamos acercarnos a la forma de ver y entender el mundo junto a la forma de actuar y crear ese mundo. Y todo ello se entrelaza y complementa con el disfrute de la vida y la felicidad configurando los caminos budistas.

  1. RADIOGRAFÍA SOCIAL

Un poco más de la mitad (58%) de las respuestas proceden de personas que viven en Latinoamérica [5] y el 38% de personas viviendo en España. Las respuestas se dividen por igual entre hombres y mujeres. La media de edad es de casi 51 años (50,7). Y por grupos de edad los más jóvenes son la minoría (representan el 11%), un tercio de las repuestas son de personas entre 30 y 49 años, y un poco más de la mitad tienen de 50 años para arriba.

Edad

Número(N)

Porcentaje(%)

18 a 29 años

22

9%

30 a 49 años

88

34%

50 años y más

144

56%

Hay unas pequeñas diferencias que merecen ser mencionadas. Hay un porcentaje algo mayor de mujeres respondiendo en España que en Latinoamérica (53% vs. 46%) y la edad media en España es algo mayor que en Latinoamérica (54 vs 48 años). Y globalmente las mujeres budistas que responden son algo mayores que los hombres (53 vs. 49 años de edad). (Tabla 1, en Anexo)

Una gran mayoría de los encuestados (72%) tienen niveles educativos muy altos (el 41% tiene estudios universitarios y el 31% tiene además estudios universitarios de postgrado), más de 1/3 se auto posiciona en estatus sociales altos y/o medio altos y la gran mayoría (87%) no tiene problemas económicos acuciantes y llega a final de mes con sus ingresos actuales y disfruta de una muy buena o buena salud (81%).

Una mayor proporción de mujeres que de hombres encuestados tiene niveles sociales y de bienestar material altos. El 82% ha alcanzado los máximo niveles educativos (frente al 65% en los hombres), se auto posiciona en las escalas sociales superiores (clase media alta y clase alta) (el 42% de las mujeres vs el 32% de los hombres), y tiene una situación económica algo mejor que los varones. Los theravāda y vajrayāna se sitúan algo más en los estatus sociales más altos y los Mahāyāna algo más en los inferiores.

Comparando estas poblaciones budistas con las poblaciones budistas de Asia (donde reside el 95% de los budistas) constatamos que el porcentaje de mujeres en esas poblaciones es también algo mayor al de hombres, pero la edad media global es algo inferior en Asia (46 años) [6].

Venerable Lama Rinchen Gyaltsen es un maestro uruguayo residente del monasterio budista de Pedreguer en Alicante, director del Centro Internacional de Estudios Budistas (CIDEB), del Instituto Paramita y del centro Sakya Rinchen Ling de Bolivia. Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=LiCw8dSnhMY
  1. CAMINANDO EN EL BUDISMO

Llegada al budismo

En los países hispanoparlantes la religión dominante es la católica y el budismo es una religión minoritaria [7] a la que no se accede/entra al nacer o en los primeros años de vida (con el bautismo) sino que es mayoritariamente un inicio más tardío y frecuentemente como proceso de conversión.

La edad media en la que inició el contacto con el budismo es de 34 años, en plena madurez, y por término medio se lleva casi 13 años practicando el budismo. La mitad iniciaron su relación con el budismo entre los 20 y los 40 años. No es, por lo general, la religión heredada de los padres, sino que se accede a ella de forma voluntaria y activa.

A diferencia de los países donde el budismo es dominante, en los países de habla hispana el acceso al budismo no es al inicio de la vida, sino que es un proceso en plena madurez de las personas. De hecho, menos del 20% iniciaron su relación antes de los 20 años.

La transmisión familiar es poco relevante, menos del 10% conocieron al budismo a través de familiares. Fue mayoritariamente a través de libros (41%) (el modelo tradicional de difusión) y también a través de los nuevos modelos de difusión masiva por internet (26%). Y una tercera parte fue a través de las relaciones sociales de amistades y conocidos. El mundo social budista (centros, maestros, charlas) y su entorno próximo (centros de yoga, y de terapías naturales) juega un papel relevante en la difusión del budismo, pero sustancialmente menor que los canales de difusión masiva y las relaciones sociales.

El nivel de identificación y cercanía al budismo es (obviamente dado que es una encuesta dirigida a personas en el mundo budista) muy alto: 8,7 en una escala de 1 nada a 10 totalmente. De hecho, la gran mayoría (81%) concentra su identificación en la parte alta de la escala (entre 7 y 10).

Y eso concuerda con las características de las personas que responden: la gran mayoría (82%) se considera parte del mundo budista consolidado (parte de la estructura de tradiciones, centros, maestros). El colectivo más importante es el de aquellos que se definen como «practicantes laicos» y que representan un poco más de la mitad de las respuestas (53%), les siguen los «estudiosos del budismo» con un 15% de respuestas y los «budistas ordenados o en proceso» (maestros, sangha ordenada, postulantes y novicios) que representan también un 15%. El 18% restante son personas entrando en el mundo budista (simpatizantes y personas interesadas en conocer más el budismo).

Tipo de relación actual con el budismo

N

%

Practicante laico/a

135

52,5%

Estudioso del budismo

38

14,8%

Simpatizante o cercano

26

10,1%

De interés por conocerlo más

20

7,8%

Postulante o novicio/a

13

5,1%

Persona ordenada (Sangha ordenada)

21

8,2%

Ministro, capellán o maestro laico

3

1,6%

Los significados del budismo

La mayoría de las personas que responden tienen una visión compleja de lo que significa el budismo para ellos y lo asocian a varias cosas a la vez. Una gran mayoría (79%) lo define como «camino espiritual», a la vez que un número también muy elevado (66%) lo define como «filosofía». Las dos formas dominantes de definición tienen que ver con la ruta a seguir y la forma de entender y ver la realidad. Le siguen en relevancia su conceptualización como prácticas para la transformación (57%), como sistema de valores (48%) y comportamientos (48%), a los que se une la asociación a camino de transformación social (30%). Aunque menos populares, un número destacado de practicantes (el 37%) lo considera como religión, mientras que el 23% lo ve como ciencia y para el 16% es también un sistema de terapias personales.

¿Con qué asocia principalmente al budismo? 

Respuestas múltiples

N

%

Camino espiritual

204

(79,4 %)

Filosofía

170

(66,1 %)

Conjunto de prácticas para la transformación

146

(56,8 %)

Sistema de comportamiento o «estilo de vida»

125

(48,6 %)

Sistema de valores

124

(48,2 %)

Religión

94

(36,8 %)

Camino de transformación social

78

(30,4 %)

Ciencia

59

(23,0 %)

Sistema terapéutico (técnicas de relajación y/o anti-estrés)

40

(15,6 %)

Otros

7

(3,5%)

Podríamos agrupar las varias definiciones entre aquellas centradas en los significados y visiones orientadas a entender la realidad, y aquellas centradas en prácticas en el camino marcado por esa visión de la realidad. En la dimensión de significados estaría la asociación a filosofía, valores, religión y ciencia. En la dimensión de prácticas destaca la definición como camino espiritual, prácticas de transformación, sistema de comportamientos, camino de transformación social y como sistema terapéutico personal. 

Encuentro Zen Latinoamericano. Paraguay, Templo Budista Zen Shinozan Takuonji Colonia Yguazu. Fuente: https://www.facebook.com/ZENLATINOAMERICANO

Acentúan un poco más la dimensión de acción y práctica ya sea con carácter individual e introspectivo o con aplicaciones sociales. La dimensión cognitiva, de formas de ver y entender, y por tanto guía de la acción, parece un poco menos relevante en la definición de budismo. Como cabezas de ambas dimensiones, y como centro de la definición que se hace del budismo, tenemos por un lado la definición como camino del 79% de las respuestas, y por el otro la definición como filosofía para un 66%.

La forma en cómo se introduce en Occidente, y tiene éxito, es menos como religión, a seguir ciegamente, y más como camino, como conocimientos y prácticas, que encajan mejor con la cosmovisión racional y científica dominante.  Y por ello es relevante notar que, en conjunción con otras definiciones, muchas de las personas que responden lo consideran también como ciencia y como sistema terapéutico.

Tal como está visto por sus practicantes, el budismo representa una estrecha relación entre significados y prácticas. Es una estructura basada en esa combinación principal de elementos que definen el camino espiritual. De hecho, dan forma a un proyecto vital con metas y formas de alcanzarlas. Podríamos entender ese proyecto vital, ese Camino, como combinación e interacción de Filosofía (como forma de entender y ver el mundo y la realidad), con Prácticas para la transformación (cambio individual y social), Valores (orientación) y Prácticas (acciones).

Hay mucha similitud en las definiciones entre las comunidades budistas a ambos lados del Atlántico, dando la misma importancia a los elementos centrales. Es interesante notar también la similitud en los planteamientos de ambos géneros. Solo resaltaríamos un par de diferencias entre ellos.  En la conceptualización como religión, los hombres acentúan mucho más que las mujeres su carácter religioso, mientras que visto como práctica de transformación lo acentúan las mujeres mucho más que los hombres.

Los budistas de la tradición theravāda destacan en su definición de budismo como Filosofía (77%) y Religión (49%) muy por encima de los budistas de las tradiciones vajrayāna y mahāyāna. Los seguidores de estas últimas destacan más que los theravāda el papel del budismo como sistema de comportamiento, práctica de transformación y camino espiritual. Unos practicantes haciendo más hincapié en las dimensiones prácticas del camino y otros en las dimensiones de significados y formas de ver e interpretar.

Bhante Sanathavihari Bhikkhu es un monje theravada mexicano-estadounidense que reside en el Centro de Meditación Sarathchandra, situado en North Hollywood, Los Angeles, California Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=pHj3gjJWFLI

¿Qué buscamos en el budismo?

Las respuestas a la pregunta de cuáles fueron las razones principales para acercarse al budismo nos ofrece una imagen también compleja. Las respuestas más relevantes (a las que han respondido un tercio o más de los encuestados) se pueden agrupar en tres conceptualizaciones diferenciadas.                         

Razones principales para acercarse al budismo (respuestas múltiples [8])

N

%

Búsqueda de crecimiento personal

123

(48,0 %)

Búsqueda de más capacidad de afrontar problemas o situaciones de sufrimiento

121

(47,53 %)

Búsqueda de felicidad

87

(34,0 %)

Búsqueda de guía espiritual

84

(32,8 %)

Posibilidad de pensar en nuevas dimensiones espirituales

74

(28,9 %)

Posibilidades de ayudar a los demás

81

(31,6 %)

Profundizar en la práctica del budismo

85

(33,2 %)

Profundizar en las enseñanzas budistas

80

(31,3 %)

Posibilidades de hacer algo para mí mismo/a

62

(24,3 %)

Posibilidades de hacer algo por la felicidad de otros

59

(23,0 %)

Curiosidad

40

(15,6 %)

Búsqueda de compañeros y amistades

1

(0,4 %)

Otras

15

(6,0%)

En primer lugar, y más destacadas, tendríamos razones de tipo personal: Búsqueda de crecimiento personal (48%), Búsqueda de más capacidad de afrontar problemas o situaciones de sufrimiento (47%) y Búsqueda de felicidad (34%). Definen las metas /los objetivos funcionales principales.

Y tras esas metas, y como segundo grupo de razones, un tercio de las respuestas hacen referencia a los elementos del camino a seguir para alcanzarlas: Búsqueda de guía espiritual (33%), la profundización en conocimientos y práctica del budismo (33% y 31%) y la orientación y acción hacia los demás (Posibilidades de ayudar a los demás (32%)). Son instrumentales para alcanzar las metas.

Las razones aducidas apuntan a una búsqueda de empoderamiento personal, guiada por espiritualidad y que se oriente a los demás. Y todo ello asentado sobre una base de budismo (conocimiento y práctica). El budismo es así visto como vehículo (conocimientos, valores y prácticas) de empoderamiento personal para alcanzar la felicidad.

No hay prácticamente diferencias entre hombres y mujeres. Los budistas hispanos a ambos lados del Atlántico coinciden también bastante en lo que buscan en el budismo. El crecimiento personal y la búsqueda de mayor capacidad para afrontar situaciones problemáticas son la prioridad en ambas poblaciones, pero en orden inverso. En España destaca más la búsqueda de crecimiento personal mientras que en Latinoamérica domina la búsqueda de mayor capacidad para hacer frente al sufrimiento, quizás reflejan dos formas diferentes de buscar lo mismo. En España sigue como el elemento principal la búsqueda de la felicidad y en Latinoamérica domina la profundización en la práctica. Parecen dibujar dos narrativas diferentes. España: crecimiento personal, mayor capacidad para afrontar problemas, felicidad. Latinoamérica: mayor capacidad para afrontar problemas, crecimiento personal, profundizar en la práctica.

Y la gran mayoría de las personas dicen haber encontrado lo que buscaban. (Claro que si no hubiese sido así posiblemente no habrían respondido a la encuesta.). El 56% ha encontrado mucho de lo que buscaba, seguido del 34% que ha encontrado bastante y un 7% que ha encontrado algo. Todo encaja con la cercanía e identificación con el budismo de las personas que han respondido y con la importancia dada a la dimensión práctica y útil del mismo.


[1] Como ponen de manifiesto los estudios de institucionalización y propagación del budismo tanto en España (con los pioneros trabajos de Díez de Velasco y la tesis de Liliana Arroyo) como en Latinoamérica (el compendio de excelentes trabajos publicados en Buddhistdoor en Español).

[2] Según el Pew Research Center, el budismo es la cuarta religión mundial (tras el cristianismo, el islam, y el hinduismo) y es seguido por casi el 7% de la población mundial. El 95% de los budistas viven en Asia.

[3] En primer lugar, deseo dar las gracias a todas aquellas personas que han respondido el cuestionario y también a aquellas entidades que han apoyado y lo han divulgado entre sus miembros y conocidos, y a todos aquellos que han extendido el cuestionario a sus amigos/as. A todos ellos les quedamos muy agradecidos por su apoyo.

[4] Datos técnicos: La encuesta se realizó, a través de Google Forms, entre el 27 de julio del 2022 y el 26 de diciembre del 2022 y se obtuvieron 257 respuestas válidas. Es la primera encuesta de estas características realizada en el mundo budista. Limitaciones del estudio: A pesar de ser una buena primera imagen de las poblaciones budistas en el mundo hispanoparlante, las dimensiones de la respuesta requieren ser cuidadoso con la extrapolación automática a toda la población budista.

[5] Las respuestas proceden de Argentina (14), Bolivia (5), Brasil (1), Chile (19), Colombia (30), Costa Rica (2), Cuba (2), Ecuador (2), El Salvador (2), Honduras (1), México (44), Nicaragua (1), Paraguay (1), Perú (5), Uruguay (8), Venezuela (11)

[6] Según datos de la encuesta World Values Survey 6, en Rodríguez (2018).

[7] El porcentaje de budistas en Latinoamérica y España es inferior al 1% de sus poblaciones según datos del Pew Research Center para 2020.

[8] En este tipo de preguntas se pueden dar varias respuestas a la vez. 

Puede leer la segunda parte de este artículo aquí