El giro eco-budista de la Escuela Villa Verde en el Brasil
EDUARDO FCO. FREYRE ROACH
Este artículo forma parte de nuestra edición especial: «Budismo, ecología y cambio climático»
Serie: Proyectos Ecológicos Budistas
La educación es un recurso de suma importancia para la capacitación en materia de ecoactivismo responsable e informado. Esto resulta un compromiso pedagógico magistralmente asumido por la Escuela Villa Verde (EVV) a cargo del Instituto Camino Medio de Alto Paraíso (ICMAP), una de las tantas sedes del Centro do Estudios Budistas Bodisatva de Brasil (CEBB).
El budismo y la pedagogía de la EVV
Alto Paraíso se encuentra en la región de Chapada dos Veadeiros en el Estado de Goiás, Brasil. Fue en este municipio donde se concibió la EVV en el año 2000. Pero en el 2013 se acuerda que el ICMAP se encargue de su gestión. Desde entonces, se adopta en su currículo la filosofía pedagógica eco-budista del CEBB.
Estas organizaciones se plantean la misión de «educar para la felicidad» y la paz, propiciando que los alumnos construyan relaciones positivas consigo mismos, con los demás y con el medioambiente. El Dharma budista apuntala la perspectiva espiritual y pedagógica de la EVV.
Así, se apela al concepto de Alayavijnana (‘repositorio de conciencia’) en la filosofía Yogācāra, para fundamentar el desafío de neutralizar los ‘karmas primarios’, es decir, las proclividades o disposiciones no virtuosas latentes de los alumnos ante las circunstancias.
Un profesor cuenta que, en una de las exploraciones por el bosque, los niños se alarmaron al ver un bothrops jararaca, especie de serpiente venenosa endémica. Tal reacción es condicionada por el temor de los padres a que fuesen víctimas de los animales salvajes, las catástrofes naturales, o el consumo de drogas y la violencia. Empero, se organizó una actividad docente donde el profesor les mostró a los alumnos una cobra, y les explicó cómo se alimenta, se reproduce y se salvaguarda. Una vez terminada la clase, el animal fue devuelto al medioambiente donde fue capturado.
¿Acaso no es obvio que movidas pedagógicas de esta índole interceptan la ecofobia, digamos, kármica y primaria de los niños? Cabe esperar que, al tiempo que crece la motivación por la contemplación y la observación de la naturaleza, así también las actitudes de simpatía, generosidad y compasión por los animales.
Venerable lama Padma Samten, líder y fundador de las aldeas, institutos, centros y escuelas del CEBB, en sus sermones sobre espiritualidad, sociedad y sustentabilidad, suele hacer referencia también a la filosofía vajrayana o budismo tántrico, en particular, a lo concerniente a las «cinco sabidurías» (inteligencias, cualidades o virtudes), que transmiten los cinco budas (dhyanis tathāgata), y que se exponen en el Kālacakra Tantra. Fernando Leão, director de la EVV, testimonia que esta doctrina constituye un sustento teórico del quehacer escolar.
La «sabiduría del acoger», o «del espejo», es un entrenamiento inspirado en el buda Akshobya, o ‘buda (o bodhisattva) azul’, implica aceptar y no juzgar al alumno, tomar en serio sus experiencias, vivencias, sentimientos y referencias condicionadas. Tal como explica el venerable Padma Samten, los budas y bodhisattvas: «escuchan a los seres y actúan dentro del lenguaje de los mismos».
La «sabiduría de la igualdad», o «del ofrecer», que representa al buda Ratnasambava, o ‘el buda amarillo’, se expresa en la habilidad pedagógica de prestar ayuda a los alumnos, y alegrarse de sus éxitos dentro y fuera del contexto escolar.
La «sabiduría de darmata», o voluntad de liberar, virtud de Vairochana, ‘buda blanco’, que conlleva al reconocimiento de las capacidades plenas de los otros, y contribuir a su liberación de rótulos e ideas preconcebidas. Lama Samten nos ofrece un ejemplo: «un maestro ante el sentimiento de frustración piensa sobre un alumno: ¡oh, su naturaleza es la naturaleza de Buda, es decir, libre. Y ante alguna frustración, la maestra aconsejaría: «usted es libre y puede hacer otra cosa».
La «sabiduría de la discriminación» del buda Amitaba, o ‘buda rojo’, es la inteligencia de encontrar alternativas correctas ante las dificultades de los estudiantes y ayudarlos a que sean virtuosos y felices.
La «sabiduría de la causalidad», asociada con el Amogasiddhi, o el ‘buda verde’, es la ética de evitar el proceder incorrecto de los otros, y, cuando este se haya consumado, tratar de dar paso a las acciones positivas.
Basta decir que las enseñanzas budistas apuntalan el «contenido actitudinal» a partir del cual se encaminan y evalúan las actividades académicas que contempla el currículo, lo cual, a su vez, abona el camino para el cultivo de la espiritualidad ‘iluminada’ y la sensibilidad de los alumnos para involucrarse en las prácticas sustentables.
Los proyectos de la EVV en acción
Junto con las referencias budistas se adopta aquí la «pedagogía de proyectos» propuesta por John Dewey, la cual en esencia invita al aprendizaje significativo, que responde a las necesidades e inquietudes de los alumnos, a contracorriente del énfasis en la transmisión, memorización y fragmentación disciplinaria de los conocimientos, y su desajuste con las problemáticas de la sociedad.
Los proyectos de la EVV se inspiran también en el pensamiento Fritjof Capra sobre la interdependencia en la naturaleza y su enfoque holístico, y la necesidad de una especie «ecología profunda» y de «alfabetización ecológica».
Viene al caso que, en el mismo sentido, venerable lama Samten y otros los líderes del CEBB traen a colación el concepto budista del ‘origen dependiente’ (pratītyasamutpāda), los ‘medios hábiles’ (upaya-kausalya), ‘las cuatro virtudes’ (brahmavihārā) y las ‘seis perfecciones’ (paramitas). Se infiere que tal apelación a la interconectividad y a la compasión desarrollen las actitudes espirituales, cognitivas y prácticas de los alumnos en su vida cotidiana y respecto al medioambiente.
Ahora, permítanme esbozar los proyectos donde se pone a prueba todo este sustento teórico, y que, a partir del segundo año de enseñanza fundamental, los alumnos se aventuran en las materias de su preferencia, y desarrollan actividades correspondientes al currículo fundamental o básico.
El proyecto «Investigando Nuestra Naturaleza» estriba en la realización de caminatas exploratorias, y en la observación y contemplación del medio ambiente local, con vistas a elevar la consciencia de la importancia de la preservación de los ríos, cascadas y manantiales.
Lógicamente, el contacto con la naturaleza en las actividades docentes es fundamental en la EVV, lo cual despierta la curiosidad, y la sensibilidad sobre la flora, la fauna y los ecosistemas de la región.
Llama la atención que, al menos un día a la semana, la Oficina de Meditación organiza secciones meditación, y precisamente, esta actividad y otras, se realizan a la intemperie, en contacto con la naturaleza, donde la misma, a decir de un profesor de la EVV, «pasa a ser profesor de paciencia, mindfulness, auxilio, y colaboración, etc.»
«Vivero Escuela: el agua vale más que el oro» es un proyecto que involucra a los alumnos en las actividades de preservación para beneficio ambiental, económico, y social. Se concibe a raíz de que recursos naturales, el consumo de alimentos, y el sustento de la población en esta región de Chapada dos Veadeiros han sido afectados por las catástrofes ambientales naturales y las acciones humanas no sustentables.
A los estudiantes se les capacita como viveristas y participan en la producción y comercialización de mudas nativas, así como en la colección y selección de semillas, la recuperación de áreas degradadas, el ecoturismo local, y otras actividades recreativas en la zona. En línea con este pensamiento, el lama dice: «No hay manera de cultivar mejores personas si no cultivamos nuestros alimentos, si no creamos redes ecológicas y redes sociales».
La EVV cuenta con la facilidad de encontrarse cercana al Parque Nacional da Chapada dos Veadeiros, un área extensa (240.611 hectáreas) para la preservación de la biosfera, de especies autóctonas y endémicas, así como sitios ancestrales de la época colonial. En 2001, el parque fue declarado por la UNESCO Patrimonio Natural de la Humanidad.
El proyecto coordina trabajos con las asociaciones de productores rurales, los asentamientos y ‘quilombos’ (comunidades formadas por esclavos fugitivos) y la Secretaría Municipal de Medio Ambiente y Agricultura Sostenible.
El proyecto «Agricultura Sintrópica» consiste en un escenario de trabajo que el ICMAP realiza en colaboración con el Centro de Investigación en Agricultura Sintrópica (CEPEAS), el mencionado Parque Nacional y el Instituto Chico Mendes de Conservación de la Biodiversidad (ICMBio).
Aquí, la preservación de las aguas, suelos, flora y fauna se conecta con la producción agrícola de alimentos saludables con un enfoque agroecológico y de agricultura sostenible, que busca la regeneración de los suelos, basándose en el aprovechamiento de los recursos que ofrece el medio ambiente local. Se realiza agricultura imitando lo que ocurre en el ecosistema natural.
La interconexión entre los factores de un agroecosistema es una variable sine qua non para potenciar la biodiversidad, la estabilidad y la resiliencia de los ‘agroecosistemas’. Se trata de que la intervención en los mismos sea mínima y holística.
La adopción de este enfoque conlleva a la diversificación de los cultivos, lo cual mejora la calidad de los suelos, disminuyendo su erosión y reduce la aparición de plagas y enfermedades en los campos.
Al reforestarse, se recupera el ecosistema forestal. Por otro lado, tras la poda se usan los troncos, hojas y arbustos de árboles, como cobertura vegetal, mulch o acolchado orgánico, para el fomento de la vida microbiana en los suelos. El reciclaje de nutrientes se realiza con el uso de abonos orgánicos producidos por las técnicas de compostaje y la lombricultura.
El proyecto de «Educación en la compasión» se plantea que los participantes desarrollen curiosidad y compasión en las prácticas educativas y en su relación con el medio ambiente.
A esto el lama Samten llama «enseñar a tus espaldas» al compromiso del profesor de proyectar acciones positivas que neutralicen lo que él denomina «O automatismo do karma» (‘automatismo kármico’), lo cual se prevé lograr mediante el cultivo de la sabiduría del buda Amoghsiddhi.
Un profesor de la EVV ilustra el accionar del docente con respecto a este punto, diciendo lo siguiente: «Cuando hay dos niños peleando, el maestro puede hablar con ellos y orientarlos hacia algo más favorable que pelear. Podemos solucionarlo con lucidez en muchas situaciones… », cultivando compasión y ecuanimidad. «Y así – propone Lama Samten – componemos el mandala de una educación más consciente», a contracorriente del proceso económico orientado al lucro.
Estos y otros proyectos de las EVV cuentan además con la oportunidad de la realización de las actividades docentes en la comunidad aldea sangha de Alto Paraíso, que como todas las aldeas del CEBB exhiben gran activismo ecológico.
El ICMAP en sus sedes acoge también familias, personas y estudiantes que no son budistas, y sus proyectos de trabajo tributan al desarrollo sostenible no solo de la aldea, sino de toda la región. Esto explica que haya recibido el reconocimiento de «Utilidad Pública».
Referencias
Bem vinda(o) à Escola Vila Verde. Instituto do Camihno do Meio. https://www.icmap.com.br/escola-vila-verde
Depoimento de profesores Escola Vila Verde. https://www.youtube.com/watch?v=xGLZV8e0WaY
Fernando Leão. As Cinco Inteligências na Educação. Revista Bodisatva. https://bodisatva.com.br/as-cinco-inteligencias-na-educacao/
________A Escola Vila Verde: https://www.catarse.me/escolavilaverde
Instituto Camihno do Meio. Educa Compaixao: Conectando que educa. https://www.icmap.com.br/educacompaixao
Lama Padme Samten. As cinco sabedorias. Revista Bodisatva. https://cebb.org.br/as-cinco-sabedorias/
Roberto Sampaio. O que é carma primário e secundário? Roda do Darma. meditação e ação https://rodadodarma.com.br/o-que-e-carma-primario-e-secundario/
Enlaces:
https://espanol.buddhistdoor.net/edicion-especial-budismo-ecologia-y-cambio-climatico/
https://espanol.buddhistdoor.net/el-planeta-en-el-que-vivimos/
https://espanol.buddhistdoor.net/una-interpretacion-ecosofica-de-la-experiencia-budista-de-ganying/
EDUARDO FCO. FREYRE R OACH
Es doctor en Ciencias Filosóficas (1987) y licenciado en Ciencias Filosóficas (1983) por la Universidad Estatal de Moscú. Eduardo ha sido profesor en la Universidad Agraria de la Habana y actualmente enseña budismo en la Maestría de Estudios Sociológicos y Filosóficos de la Religión de la Universidad de La Habana y en el Centro de Estudios Psicológicos y Sociológicos de La Habana. Ha tenido la oportunidad de dictar cursos en universidades de Brasil, México, Ecuador y Bolivia. Asimismo, es becario postdoctoral del Grupo PAIDEIA FE de la UNICAMP. Además, posee un diploma de maestría en estudios budistas otorgado por el Centro de Estudios Budistas de la Universidad de Hong Kong. Sus investigaciones se centran en diversas áreas de interés, incluyendo el budismo y Wittgenstein. Recientemente ejerció como profesor visitante en la Universidad Federal de Santa Fe Catarina (UFSC) en Florianópolis, estado de Santa Catarina, Brasil, donde imparte la disciplina El Budismo y la Ciencia.