Los budistas, sus valores y prácticas, en países de habla hispana. Una exploración sociológica. Tercera parte.
JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ DÍAZ
Departamento de Sociología de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Barcelona
Puede leer la segunda parte de este artículo aquí
Este artículo forma parte de la edición especial «El budismo en los países de habla hispana»
- DIMENSIÓN SOCIAL / MUNDO SOCIAL
La visión, orientación y relación con los demás junto a la participación o colaboración en organizaciones y actividades sociales dan forma a la dimensión social de la práctica y camino espiritual.
La confianza en los demás es un elemento central para entender tanto los sistemas de relaciones en los que se participa, y los círculos sociales que se crean con ello, como para entender el papel social que los budistas tienen.
La confianza de los budistas en la mayoría de las personas es bastante alta, en una escala de 1 nada a 10 totalmente, la media es de 6,82. Los niveles de confianza en los otros (más cercanos o lejanos) configura los círculos sociales de confianza en los que viven los budistas. Las parejas, seguidas de los familiares cercanos y las amistades ocupan el espacio central de nuestro sistema social de confianza (medias altas en una escala de 1 a 5: 4,41; 4,17; 4,05). Son espacios sociales de relaciones fuertes y cohesionadoras. El segundo círculo social de confianza está formado por compañeros de organización/asociación y también de trabajo. Y el tercer círculo, con niveles algo más bajo de confianza, está formado por familia no cercana y personas de otras religiones y/o nacionalidades. En quien menos se confía, aunque están por encima del punto medio de la escala de 1 a 5, es en personas recién conocidas (media de 2,8) y en vecinos (3,02).
Relaciones sociales
Las relaciones sociales establecen canales de comunicación entre personas e instituciones y favorecen la cohesión social. Tanto en las relaciones con otros budistas de otros centros y tradiciones como con su comunicación con sus redes sociales personales, los budistas contribuyen a la creación de comunidades amplias y a la diseminación de la cosmovisión budista en la sociedad.
El 64% de los encuestados dice tener relaciones con budistas de otros centros. Y más de la mitad (54%) tienen relaciones con más de 1 persona. Estos datos ponen de manifiesto un sistema importante de relaciones sociales entre budistas de diferentes centros y tradiciones dando forma (tejiendo) una comunidad budista amplia y compleja. El estar cercano a varios centros (29%, casi 1/3), a varios maestros (más de la mitad: 54%) y a varias tradiciones a la vez (27%) teje una fina red que posibilita una visión quizás más amplia y compleja del budismo y que puede también facilitar la creación y fortalecimiento de relaciones entre centros, comunidades y tradiciones diferentes facilitando un sentimiento identitario y de comunidad amplia.
Las relaciones sociales crean redes de comunicación a través de las cuales los budistas, y sus sistemas de valores y prácticas, se insertan en el entramado social. Una gran parte de los practicantes respondiendo a la encuesta (el 62%) hablan del budismo y comparten su experiencia con personas no budistas. La mayoría de las personas no budistas con los que hablamos de temas relacionados con el budismo pertenecen al primer círculo de relaciones más fuertes (con amistades 78%, con familia 57%). A este le siguen nuestras conversaciones con el segundo círculo social (compañeros de trabajo 37% y/o organización 22%). Tras de ellos estaría hablar con expertos y finalmente con conocidos del barrio. La comunicación con el mundo social exterior, al budista, es crucial también para su propia supervivencia y expansión [i].
Papel social
El papel social de los budistas se concreta además en una alta participación en organizaciones civiles y sociales de diverso tipo orientadas fundamentalmente hacia la sociedad. A través de esa participación se introducen en el tejido social amplio y contribuyen a su forma y dinámica. Los budistas destacan por ser miembros, obviamente, de organizaciones religiosas (el 36%), y también de organizaciones humanitarias (el 29%), organizaciones culturales (25%), asociaciones profesionales (23%) y organizaciones deportivas y/o de ocio (23%). Son vías de creación de relaciones con el medio social y formatos a través de los cuales las visiones y prácticas budistas se diseminan en el conjunto de la sociedad esperando tener un impacto positivo.
Y a la vez están implicados en acciones relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. Casi la mitad de los encuestados (46%) participa o colabora en alguna actividad relacionada con los ODS. Los ODS en los cuales se participa más (más del 10% de los encuestados los mencionan) son el objetivo de «mejora de la salud y bienestar» (ODS3) (en los que se implica el 20% de los practicantes), seguido del ODS4 «por una educación de calidad» (en el cual participa el 14%), el ODS5 de «igualdad de género» (13%), el ODS13 de «acción por el clima» (12%), y el ODS10 de «reducción de las desigualdades» (el 11).
Además, una parte considerable de los practicantes (el 14%) colabora con personas de otras escuelas budistas o tradiciones religiosas en algunas de esas acciones creando un sistema relacional inter budista e interreligioso. Los objetivos en los que más se colabora con otras escuelas o religiones son el OBS3 (Salud y Bienestar: 21 personas) y el ODS1 (Poner fin a la pobreza: 13 personas, y el ODS4 (Educación de calidad: 13 personas).
Las relaciones de colaboración en proyectos ODS son menos frecuentes y más débiles entre las propias tradiciones budistas. Son muy fuertes entre centros de la misma tradición y con entidades católicas (posiblemente dominantes en entornos sociales católicos).
Relaciones de colaboración en proyectos ODS | ||||||||||
Con católicos | Con otros cristianos | Con mahāyāna | Con theravāda | Con vajrayāna | ||||||
# personas | # ODSs | # personas | # ODSs | # personas | # ODSs | # personas | # ODSs | # personas | # ODSs | |
Seguidores | ||||||||||
Theravāda | 3 | 3 | 1 | 1 | 8 | 7 | 2 | 2 | ||
Mahāyāna | 10 | 5 | 5 | 4 | 10 | 5 | 3 | 3 | 3 | 3 |
Vajrayāna | 25 | 16 | 4 | 4 | 4 | 3 | 1 | 1 | 35 | 16 |
Los seguidores vajrayāna destacan por su alto nivel de colaboración tanto con practicantes de su misma tradición (entre centros) como con católicos. Los mahāyāna siguen la misma pauta relacional pero menos intensamente. Y los theravāda tienen más relaciones dentro de la misma tradición y con personas de otras denominaciones religiosas. A nivel global, dominan las relaciones internas en la misma tradición y las externas con entidades católicas. Y los datos apuntan a cierta distancia social y menor colaboración entre tradiciones. El entorno social y físico, posiblemente con una alta presencia de entidades de acción social católicas, podría explicar la estructura relacional existente.
De todo ello podemos destacar dos elementos. La importante participación y/o colaboración de los budistas en organizaciones sociales y también en proyectos sociales ligados a las ODS. El segundo elemento es la creación de relaciones de colaboración entre centros, tradiciones y religiones como parte de esa participación en organizaciones y en ODSs. Las interrelaciones crean lo social y las acciones le dan forma.
- HACIA EL FUTURO
Una gran mayoría de los budistas ven un futuro abierto, el 44% creen que todo cambiará, aunque desconocen cómo, y el 33% creen que la crisis que hemos vivido es una oportunidad para cambiar y que todo vaya mejor [ii]. Frente a esa visión abierta y/o optimista, una cuarta parte tiene una visión de futuro predeterminado y no positivo. Casi un 8% cree que nada cambiará y el 17% que todo irá peor en el futuro.
Es interesante resaltar que los seguidores theravāda (40%) sobresalen por considerar la crisis reciente como una oportunidad para un futuro mejor frente a casi la mitad de mahāyānas y vajrayānas que ven el futuro incierto, aunque abierto. Y las mujeres destacan más que los varones por creer que la crisis es una oportunidad mientras que los hombres destacan un poco más por ser más pesimistas (deterioro o todo seguirá igual). La idea de cambio e impermanencia es central en su visión de futuro y en ella domina la idea de un futuro abierto, desconocido o mejor.
Creando futuros mejores
Como resultado/asociado a esa idea de futuros abiertos, y obviamente asociado a la Ley del Karma, las respuestas a la encuesta muestran que la mayoría de los budistas hacen algo por un mejor futuro. Solamente el 2,4% responden que no pueden hacer nada.
El centro de la acción de los budistas para un mejor futuro es el cuidado del medio ambiente (el 72% de los budistas hacen algo en ese ámbito) y la ayuda a los demás (70%). Como instrumentos también para conseguir mejores futuros indican los cambios personales en estilos de vida y de consumo (63% y 65% respectivamente). Algo más de mitad de las personas que responden la encuesta dicen que para alcanzar esa meta están siendo, o intentando ser, menos egoístas (59%) y dedican más tiempo a estar más cerca de los seres queridos (55%).
Las dos grandes líneas de acción hacia mejores futuros están centradas en el medio ambiente y en el amor a los demás. Para un mejor futuro medio ambiental los budistas actúan en el presente con acciones directas, con cambios en estilos de vida y siendo menos egoístas. La orientación hacia el bienestar de los demás, parte de ser menos egoísta y de los cambios personales, se traduce en ayudar a los demás y estar más con los seres queridos. Las acciones para futuros mejores pueden ser vistas como expresiones de amor no únicamente hacia todos los seres vivos actuales sino también hacia los del futuro.
El futuro (los futuros) es un tema central en la cosmovisión budista. La impermanencia y la Ley del Karma son la base de la visión de futuros abiertos y de futuros en construcción. Las ideas de/ Tanto el camino espiritual y/o desarrollo personal están orientadas a futuros como resultado de las acciones presentes, tienen metas futuras. El futuro y su construcción es central en el proyecto vital que es el budismo.
- VIDA
Y acabamos con unas pequeñas notas acerca de la vida de los budistas encuestados. La gran mayoría de los budistas (el 72%) se consideran muy felices o bastante felices frente a un 24% que dice ser solo algo feliz y un 4% que se considera poco feliz. Y la gran mayoría (el 81%) tiene niveles de salud muy altos, aunque casi el 20% no disfruta de buena salud.
Nivel de felicidad actual | Nivel de salud | ||||
| N | % |
| N | % |
Muy feliz | (40) | 15,8% | Muy bueno | (67) | 26,3% |
Bastante feliz | (142) | 56,1% | Bueno | (140) | 54,9% |
Algo feliz | (61) | 24,1% | Regular | (43) | 16,9% |
Poco feliz | (10) | 4% | Malo | (4) | 1,6% |
Nada feliz | 0 | 0 | Muy malo | (1) | 0,4% |
En una escala de 1 a 10 (de menos a más), la media de felicidad es de 7,54, la media de satisfacción con la vida es de 7,94 y la media de disfrute de la vida es 7,78. Es en términos globales una población que se considera feliz, se siente satisfecha, y disfruta de una buena salud y de la vida. Es una buena vida.
No hay grandes diferencias entre las tres tradiciones principales. Las únicas pequeñas diferencias mencionables son que los seguidores de las tradiciones mahāyāna y theravāda tienen niveles de felicidad, satisfacción y disfrute un poco por encima de la media frente a los theravāda que se sitúan un poco por debajo. Las mujeres tienen los niveles más altos en esos tres indicadores de bienestar, y los budistas latinoamericanos tienen un nivel de felicidad algo más alto que los españoles, pero un poco más bajo en satisfacción y disfrute de la vida. (Tabla 1)
[i] Como se vio en el estudio de una comunidad y monasterio budista europeo. Rodríguez, Ramón y Arroyo, 2011.
[ii] La población budista es más optimista y confía más en las posibilidades de cambio que la población general respondiendo a una encuesta en el 2020 (Rodríguez, 2020). El 77% de los practicantes budistas creen que el futuro está abierto y puede ser mejor frente al 61% de la población general en ese momento. Y el 32% de estos últimos creían que el futuro sería peor frente al 17% de los budistas.